Con el corazón en la mano, el bate encendido, sólido pitcheo y una defensa impecable, la Selección masculina de sóftbol de Venezuela conquistó su primer título mundial, venciendo 3‑0 a Nueva Zelanda en una final que ya es parte de la historia deportiva del país y del continente.
Desde el primer lanzamiento, el equipo venezolano mostró orden, concentración y hambre de gloria. Con una actuación magistral desde la lomita de pitcheo y un bateo oportuno que silenció a uno de los rivales más fuertes del torneo, los criollos consolidaron una campaña perfecta que tuvo su broche de oro en tierras canadienses.

Dos cuadrangulares oportunos —uno en la tercera entrada y otro en la sexta— encendieron la emoción en el banquillo vinotinto y sellaron un marcador que reflejó no solo el dominio en el terreno, sino también el carácter y la unidad de un equipo que luchó con el alma por su país.
Un triunfo que une a todo un pueblo de Venezuela
Más que un campeonato, esta victoria representa el esfuerzo de una generación que ha crecido creyendo en el poder del deporte como motor de esperanza y transformación. Cada lanzamiento, cada jugada, fue un homenaje a quienes practican el sóftbol desde las barriadas, los campos improvisados y las ligas locales en Venezuela.
“Jugamos con el alma por Venezuela”, expresaron emocionados los protagonistas del encuentro. Y no era para menos: este logro no solo los convierte en campeones, sino en embajadores de la pasión, la disciplina y el talento venezolano.
De regreso al país, los jugadores fueron recibidos como héroes. Familiares, fanáticos y autoridades deportivas los esperaron con banderas, lágrimas y orgullo. El ambiente fue de fiesta nacional, y las palabras de reconocimiento no se hicieron esperar. Este título es también un mensaje claro: Venezuela está lista para seguir brillando en el escenario internacional.
Un triunfo para toda América Latina
Desde Rostro Caribe celebramos este hito que no solo enorgullece a Venezuela, sino que inspira a toda la región porque cuando el talento se acompaña de lucha y corazón, el Caribe y América Latina también celebran.
Rostro Caribe
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